El amplio seguimiento de la huelga de médicos paraliza en la Región de Murcia consultas, pruebas y quirófanos

La jornada comenzó a las 9.00 horas con protestas a las puertas de los centros sanitarios. Las más numerosas, en el Santa Lucía y La Arrixaca. Los profesionales mostraron «el rechazo unánime del colectivo ante el borrador de estatuto marco». A juicio del Sindicato Médico, esta norma «no solo afecta» a las condiciones laborales «y al futuro de los médicos más jóvenes, sino que compromete de manera muy grave la calidad de la asistencia y el sostenimiento del sistema sanitario».

«Prácticamente el 100% de los médicos del Maternal de La Arrixaca estamos de huelga, lo que afecta a las consultas externas de Ginecología, Obstetricia y la Unidad de Reproducción Asistida», detalló el ginecólogo Jesús Sánchez Romero a las puertas de este hospital. «Llevamos 20 años con una normativa que hace incompatible nuestra vida laboral y familiar, con un modelo de guardias que nos lleva a hacer 60, 70 o incluso 80 horas semanales, y este estatuto marco perpetúa este sistema», resumió. Aunque en un principio el Sindicato Médico denunció por abusivos los servicios mínimos en el Servicio Murciano de Salud, un acuerdo de última hora flexibilizó estos mínimos, lo que ha permitido amplificar el impacto del paro sobre todo en consultas externas.

En el Policlínico de La Arrixaca, las salas de espera se encontraban prácticamente vacías este viernes en servicios como Cardiología, Neumología o Medicina Interna. No ocurría lo mismo en Reumatología, donde los pacientes se agolpaban sin saber si serían atendidos. «Teníamos cita esta mañana pero nos acaban de comunicar que el médico está de huelga, así que me vuelvo a Los Garres», explicaba con estoicismo Rosa. Luis, que tenía cita a las 9.30, tuvo más suerte, y fue atendido por uno de los dos únicos reumatólogos que este viernes permanecían en su consulta, de un total de 11 profesionales. «Me alegra no tener que volver, porque llevaba seis semanas esperando para la cita», contaba con alivio.

En algunos casos, a los pacientes se les avisó este jueves para que no acudiesen al hospital, pero en otros, las consultas se cancelaron en el último minuto. «Vengo de Pliego, me he hecho 50 kilómetros para venir, me he tenido que pedir el día en el trabajo y mi padre me ha acompañado. Y ahora me tengo que volver, no entiendo que no me hayan avisado antes», se quejaba María José, que lleva cinco meses aguardando para una primera cita con el otorrino, y que tendrá que volver otro día a La Arrixaca.

En las consultas externas de Pediatría, el impacto de la huelga fue también evidente. Las salas de espera se encontraban vacías este viernes. El seguimiento fue masivo, y solo permanecían abiertas algunas consultas, como la de Traumatología Infantil. En cuanto a los quirófanos, La Arrixaca asume sobre todo intervenciones urgentes o no demorables, como cirugías oncológicas. De ahí que el impacto sea menor. No obstante, un 35% de los quirófanos del hospital permanecen cerrados este viernes, según datos del Sindicato Médico.

En Cardiología de La Arrixaca se mantuvo la actividad de las Unidades de Arritmias y Hemodinámica, pero el paro es masivo en consultas externas. En el Policlínico solo había un cardiólogo pasando consulta a primera hora de este viernes. Los servicios mínimos garantizan que los servicios de Urgencias, UCI, unidades de diálisis y hospitales de día Oncológicos estén cubiertos al 100%.

En el Hospital del Noroeste, el Sindicato Médico habla de un seguimiento del 95%, con una paralización de la actividad quirúrgica programada no demorable. En el Reina Sofía, el seguimiento fue masivo en Radiodiagnóstico, aunque los servicios mínimos permitieron atender las pruebas urgentes. En Medicina Interna, el paro fue también muy significativo, casi total en secciones como Infecciosas. En cuanto al Morales Meseguer, la actividad también se vio afectada. En los quirófanos solo se atendió a pacientes oncológicos y urgencias. En las consultas de Cirugía, solo permaneció abierta la de Mama.

En el Santa Lucía, el Sindicato Médico cifró «en un 100%» el seguimiento, con lo que «sólo están funcionando los servicios mínimos», señaló Marieta Piqueras, delegada de la organización en Cartagena. La programación quirúrgica se suspendió, salvo la no demorable. Lourdes fue una de las pacientes afectadas. Lleva seis meses esperando a que le extirpen un quiste ovárico. A finales de mayo, protestó por una demora que ya supera los tiempos máximos fijados por el Servicio Murciano de Salud (150 días para una cirugía). Le prometieron que la llamarían pronto. En efecto, el 2 de junio la citaron para que ingresase el jueves 11. «Llegué a las cinco de la tarde, me pusieron la heparina, estuve con dieta blanda y me dijeron que a las 7.55 de la mañana estuviese preparada porque este viernes era la primera para entrar al quirófano», relata. A esa hora, Lourdes estaba ya dispuesta, pero el reloj empezó a avanzar mientras aguardaba. «Las auxiliares y las enfermeras me decían que no sabían nada, y así estuvimos hasta que a las 10.30 me dijeron que los médicos estaban de huelga y la intervención se suspendía».

La paciente no oculta su enfado. «Yo no estoy en contra de la huelga, al contrario, pero esto es un daño psicológico que no entiendo. ¿Por qué me han tenido esperando sin comer ni beber, y con los nervios, hasta las diez y media?», se pregunta. Lourdes tiene ya cita, para el lunes, y confía en que por fin pueda pasar página.

En Atención Primaria, el seguimiento fue desigual. El Sindicato Médico lo cifró en un 72%. Mientras en el Noroeste pararon el 89% de los médicos de centros de salud y consultorios, en Cartagena lo hicieron el 59%, siempre según los datos de Cesm. En algunos centros de salud la huelga fue casi total, mientras en otros pasó más desapercibida. Así, en El Carmen, en Murcia, solo secundó la convocatoria uno de los 15 médicos de familia del centro, además del ginecólogo que atiende la Unidad Ginecológica del Área (UGA). Sin embargo, unas calles más allá, en el centro de salud de Floridablanca, todas las consultas lucían carteles de apoyo a la huelga y tan solo funcionaban los servicios mínimos. «Tenía cita pero mi médica está de huelga. Supone una molestia porque te has pedido el día y ahora no tienes consulta, pero yo estoy a tope con mi médica y con la sanidad pública. Los que fallan son quienes la gestionan», aseguraba un paciente que prefería no identificarse.

Para los profesionales, el borrador de estatuto marco planteado por el Ministerio es una oportunidad perdida para regularizar un sistema de guardias que «no contempla las horas extraordinarias como lo que son, de forma que ni siquiera computan para la jubilación», lamentó Gloria Martínez, uróloga en La Arrixaca. «Tenemos derecho a un horario digno», resumió. El Sindicato Médico también rechaza que las jefaturas de servicio y de sección sean incompatibles con la actividad privada, y que a los MIR que terminan su periodo de residencia se les obligue a dedicarse en exclusiva a la pública durante cinco años si optan por el Sistema Nacional de Salud. «Es un modelo de incompatibilidad que va a generar un enorme perjuicio a la sanidad pública», advirtió Clemente Casado, presidente del Sindicato Médico en la Región de Murcia. La organización convocante del paro advierte de que seguirán las protestas si el Ministerio de Sanidad no atiende sus reivindicaciones.

Por Inma Ruiz

La participación en la huelga de médicos en Lorca ha sido masiva en el hospital Rafael Méndez y en los centros de salud del municipio, según informó el sindicato médico CESM. En Atención Primaria, del 81%, y en el hospital, del 85%. Los facultativos se concentraron a las 9 horas ante la puerta del servicio de Urgencias, donde la portavoz, Encarna Pérez, dio lectura a un manifiesto con sus reivindicaciones.

«Es un día más tranquilo de lo normal y solo se habla de la huelga», dijo el responsable del aparcamiento del centro hospitalario, que registró un 30% menos de vehículos que en cualquier otra jornada. «¿Es que hay huelga?, a mí me han hecho la revisión del marcapasos y hemos entrado antes de la hora incluso», dijo María Huertas Gracia, que esperaba el autobús tras salir de la consulta de Cardiología en el hospital lorquino.

El paro de los médicos «en general los pacientes lo están aceptando muy bien, cuando se lo explicamos nos apoyan y piden cita para otro día», aseguró la delegada responsable del Área III de CESM, Rosa Tudela. El único altercado de la jornada se ha producido en el centro de salud de La Viña, donde una usuaria ha comenzado a gritar porque no entendía que su médico no pudiera atenderla.

«Se me ha acabado el tratamiento, pero mi médico no está y me han dado cita para el jueves que viene. No sabíamos quién estaba en huelga», se quejó Carmen Soler, otra usuaria del centro de salud de La Viña, que resultó afectada por el paro.